
La trama sigue a dos modelos, Yaya (Charlbi Dean) y Carl (Harris Dickinson), una joven pareja que desea ganar dinero convirtiéndose en influencers, y vemos 3 momentos de su historia. Comienzan a ascender logrando tikets para un lujoso yate repleto de millonarios, pero lo que les espera a bordo es un entorno cada vez más surrealista y cómico.
Ese barco solo nos va a demostrar el abuso y los privilegios del dinero, pero todo va a cambiar en el momento que naufragan y las personas que parecian desechables, terminan siendo las más importantes. Los actores principales hacen un excelente trabajo al dar vida a personajes que son en su mayoría superficiales y vanidosos, pero que tienen momentos de vulnerabilidad y humanidad.
El título de la película hace referencia al término utilizado en la moda para describir la parte inferior del triángulo que forman los senos y la entrepierna, y que supuestamente es la parte más deseable del cuerpo femenino para las cámaras. La película utiliza esta idea para explorar los temas de la moda, la vanidad y el capitalismo.
A lo largo de la película, el director juega con la percepción y la realidad, utilizando la comedia para subvertir las expectativas del público. A pesar de la temática cómica, la película tiene momentos inquietantes y perturbadores, con una sensación constante de tensión subyacente. Los personajes están atrapados en un bucle de comportamiento autodestructivo, y la comedia a menudo se utiliza para enmascarar la oscuridad subyacente.
Es una película inteligente y divertida que utiliza la comedia para explorar temas más oscuros. La dirección de Östlund, la cinematografía y la actuación son todos excelentes, y la película es un recordatorio de que la moda y la belleza pueden ocultar una gran cantidad de tristeza y desesperación.